img-rotate img-rotate img-rotate

Nueva muestra de ingeniería social en España: el Gobierno quiere cambiar el sistema de apellidos

El Gobierno ha dado un paso más en su proyecto de ingeniería social y ha creado un nuevo conflicto donde no lo había al aprobar el Consejo de Ministros una modificación del Proyecto de Ley del Registro Civil que pretende cambiar el sistema de apellidos.

Las modificaciones propuestas por el Ejecutivo de Zapatero, en aras de la ‘igualdad’, rompen con nuestro entorno occidental al eliminar la prioridad del apellido paterno, algo inédito prácticamente en toda Europa y en el mundo en general, donde se sigue interpretando la asignación de los apellidos como hasta ahora lo hacía España.

Si sale adelante el proyecto de ley, que está a la espera de tramitarse en el Congreso, la prevalencia del apellido paterno a la hora de registrar el orden de los apellidos pasará a mejor vida.

Hasta ahora, el cambio de apellido puede pedirlo la persona interesada al alcanzar la mayoría de edad. Con la reforma, se preguntará a los padres. En el caso de que no haya acuerdo entre los progenitores, el orden de los apellidos del recién nacido se establecerá alfabéticamente.

Además, todos los datos se digitalizarán en una base central con acceso a todo y desde todos los registros civiles de todas las ciudades españolas. También desaparecerá el libro de familia y cada persona quedará registrada individualmente con un ‘Código Personal de Ciudadanía’.

Familias y juristas, en contra

La decisión del Consejo de Ministros en este tema ha levantado una inmediata y generalizada polvareda. Asociaciones de familias y juristas consideran que la propuesta es innecesaria y no figura precisamente entre las demandas más urgentes de los españoles, por lo que todo apunta hacia una nueva ‘cortina de humo’ del Gobierno.

El Foro de la Familia, el Instituto de Política Familiar, la Federación Española de Familias Numerosas o la Confederación de Padres Católicos (Concapa) critican la decisión, como también lo hace la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA).

Benigno Blanco, presidente del Foro de la Familia, considera que, “dados los síntomas que ha mostrado este Gobierno en su afán de destruir a la familia, en España resulta inevitable sacar esta lectura”.

Por su parte, Luis Carbonell, presidente de la Concapa, cree que esta “ocurrencia” refleja “la incapacidad del Gobierno a la hora de solucionar problemas como la educación y el paro, jugando al despiste y complicando la convivencia”.

Los de la ‘Z’, perjudicados

También ve “innecesaria” la propuesta María Pérez-Galván, miembro de la junta directiva de AEAFA, quien recuerda que “ya estaba regulada la posibilidad de invertir el orden de los apellidos […] Con este criterio habrá en el futuro menos ciudadanos que se apelliden Zamora o Zapatero que Arias o Aznar”, concluye.

Esa es precisamente una de las cuestiones motivo de crítica, que con esta decisión, de aprobarse definitivamente, se tenderá a una extinción de los apellidos a partir de las últimas letras del abecedario. Si los padres no se ponen de acuerdo o no hacen nada al respecto las primeras letras prevalecerán, al formar parte siempre del primer apellido.

Se argumenta que precisamente esto es lo que pasa ahora con el apellido de la mujer, pero eso no es así ni de lejos, aunque sea lo que defienden o piensen quienes utilizan tales argumentos.

Cabe resaltar que la desaparición del apellido de la mujer no es la desaparición de ese apellido en el conjunto de la sociedad, ya que la distribución del mismo es aleatoria entre hombres y mujeres. No hay apellidos específicos de la mujer o del hombre. En este caso la distribución de la supresión no es aleatoria sino ordinal y desaparecen las letras finales del abecedario.

Ruptura de la interpretación genealógica

Otra cuestión es que la asignación de los apellidos tiene valor personal pero también tiene una dimensión social, en el sentido en que permite una interpretación de la genealogía.

En nuestra tradición cultural la interpretación genealógica siempre ha sido la misma. Si esto ahora se quiebra supondrá una ruptura interpretativa. Por ejemplo, cuando se estudie un personaje histórico no se sabrá quién es el padre o la madre. Esto es grave porque se trata de valores de una naturaleza histórica que vienen de muy atrás y se deberían valorar más.

La cuestión de fondo es que nos encontramos ante una nueva manifestación de ingeniería social. Es decir, diseñar al margen de la historia y del contexto social como ha de ser en este caso el apellido de las personas.

Es evidente que ha de haber una libertad de cambiar el apellido pero sólo de forma singular y de manera adulta, pero no crear un sistema que ya lo condiciona desde los padres.

Cuestión aparte es el caso de Cataluña, donde el apellido de la madre siempre aparece, aunque el proceso de castellanización tiende a hacerlo olvidar. Por esto la forma correcta en catalán es utilizando la conjunción ‘i’ entre el apellido paterno y el materno.

http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia.php?id_noticia=18368&id_seccion=23

Contáctenos





















































































































































































Copyright © Consultores de Guatemala - consultoria y asesoria especializada, auditoria estudio, evaluacion, analisis, dictamen, diagnostico y capacitacion
Consultores Guatemala, Consultoría Guatemala 33-2016
Powered by PlusSouth | PlusSouth.com Simply Smarter. | Consultores Guatemala empresa consultora Guatemala Consultoría Guatemala